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BLOQUE TRES
MUJER SEXTA.-
Sí, ¡por Zeus salvador! Sí ese hombre se pusiera la piel de Argos, sería el único para
administrar
le cosa pública.
PRAXÁGORA.-
Ea, mientras todavía quedan estrellas en el cíelo, dispongamos lo que debemos hacer, pues
le Asamblea, para la que venimos dispuestas, empezará con la aurora.
MUJER PRIMERA.- ¡Por Zeus! Tú debes tomar asiento al pie de la tribuna, frente a los Pritánaos.
MUJER SÉPTIMA.- Yo me he traído esta lana para cerdearle durante la Asamblea.
PRAXÁGORA.- ¿Durante la Asamblea? ¿Pero qué dices desgraciada?
MUJER SÉPTIMA.- Sí, por Artemis, sí. ¿Dejaré de oír porque esté cardando? Tengo e mis hijitos desnudos.
PRAXÁGORA.- ¿Pero estáis oyendo esto? ¿Ponerse a cerdear cuando es preciso no dejar ver a los asistentes
ninguna parte de nuestro cuerpo! ¡Estaría bonito que en medio de la multitud una de nosotras se lanzase
a la tribuna, se alzase los vestidos y dejase ver su.
.. Formísío. Por el contrario, sí envueltas en nuestros
mantos ocupamos los primeros puestos, nadie nos reconocerá; y si además sacamos fuera del embozo
nuestras soberbias barbas y les dejamos extenderse sobre el pecho, ¿quién sería capaz de no tomarnos
por hombres? Agirrio, gracias a la barba de Prónomo, engañó a todo el mundo: antes era mujer, y ahora,
como sabéis, ocupa el primer puesto en la ciudad. Por tanto, yo os conjuro por el día que va nacer, a que
acometamos esta audaz y grande empresa para ver si logramos tomar en nuestras manos el gobierno de
la ciudad; porque lo que es ahora ni a remo ni a vela se mueve la nave del Estado.
MUJER SÉPTIMA.- ¿Y cómo una Asamblea de mujeres con sentimientos femeninos podrá arengar a la
masa?
PRAXÁGORA.- Nada más fácil. Es cosa corriente que los jóvenes más disolutos sean en general los de más
fácil palabra, y, por fortuna, esta condición no nos falta a nosotras.
Fuente:
Consultado el 20 de noviembre de 2014.