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B
loque 
I
Identifcas la Filoso ía como disciplina global
Actividad de aprendizaje 3
Vamos a practicar lo que acabamos de estudiar. En el siguiente texto hay dos pre-
misas y una conclusión. Para facilitar el ejercicio hemos numerado los párrafos. En 
el primero hay una premisa general; en el segundo, una particular, y en el tercero 
podremos encontrar una conclusión. ¿Puedes identifcarlas?
1. Los medios de comunicación nos permiten recibir y emitir mensajes de 
cualquier tipo, nos facilitan la comunicación. A lo largo de la historia, han 
facilitado al ser humano la comunicación, y con ello han incrementado 
nuestra capacidad para organizarnos, permitiéndonos 
poner atención a 
cosas que pasan en lugares distantes de nosotros. 
2. Pero los medios de comunicación también pueden distraernos, hacién-
donos llegar mensajes en momentos en que estamos tratando de con-
centrarnos en alguna actividad. En los últimos años, el teléfono celular 
ha sido quizás el medio de comunicación que más ha impactado nuestra 
vida cotidiana. Nos permite enviar y recibir información prácticamente 
desde cualquier lugar en que nos encontremos. Gracias a 
ellos pode-
mos, sin importar la distancia que haya de por medio, 
estar al corriente 
de la evolución de la salud de algún familiar enfermo o de las necesida-
des de nuestro negocio. 
3. Pero al igual que ocurre con todos los demás medios de comunicación, 
el teléfono celular también puede ser una fuente de distracción. ¿Cuán-
tas veces no hemos interrumpido una actividad que demandaba nuestra 
atención, a veces urgente, por atender a algún aviso curioso o simpático 
de algún amigo o familiar? ¿Cuántas veces no atendemos a la persona 
que tenemos enfrente por estar “chateando” o revisando nuestras cuen-
tas de redes sociales?
Una vez que hayas encontrado las dos premisas y la conclusión, escribe tres breves 
proposiciones, una para cada una, numeradas del 1 al 3, tal y como hicimos en el 
ejemplo del futbol, el césped y el agua de riego. 
Es importante que practiquemos esta capacidad tan frecuentemente como poda-
mos. Siempre que leamos un periódico, una revista, un libro de Historia, podemos 
esforzarnos por encontrar las premisas que conducen al autor a la conclusión de la 
que nos quiere convencer. Si encontramos las premisas, las podemos considerar 
con atención aisladamente. Es muy importante que podamos hacer esto porque de 
unas premisas falsas no puede obtenerse una conclusión verdadera. Ilustremos 
esto con un ejemplo: