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El término 
guerra de castas
fue acuñado en el siglo 
XIX
y 
por costumbre se conserva 
este nombre; otros prefieren 
denominarla guerra social.
Dato interesante
Después de que México declaró su independencia de 
España en septiembre de 1821, continuaron los abusos 
contra los mayas al igual que en la época virreinal. En 
1824, cuando México ya era independiente, Yucatán 
decretó la abolición del tributo y de la esclavitud. Al año 
siguiente, cuando los mayas creían que se habían librado 
de esas cargas, el Congreso ordenó que siguieran pagando 
contribuciones a la Iglesia. Al poco tiempo se agregó el 
pago de un impuesto para el gobierno, a razón de 12 reales 
por cada varón. Aparte, la Iglesia exigía ciertas cantidades 
de dinero por el bautizo y el casamiento. 
Otro duro golpe se dio en 1825 cuando una ley autorizó 
vender las tierras baldías de Yucatán, es decir, las que 
carecían de dueño. El decreto aclaró que los terrenos de 
los pueblos quedaban fuera de estas ventas, pero aun así 
se cometieron atropellos porque en repetidas ocasiones las 
tierras de los mayas fueron confundidas con las baldías. 
Por esta razón, las haciendas dedicadas al cultivo de la 
caña de azúcar aumentaron sus tierras a costa del despojo 
de los pueblos. Aunque estas acciones provocaron el auge 
azucarero en Yucatán, para los mayas significó mayor 
pobreza.
Cansados de soportar tantos agravios, varios líderes se 
reunieron para conspirar contra el gobierno, entre ellos 
Jacinto Pat, cacique de Tihosuco, Cecilio Chi, de Tepich y 
Manuel Antonio Ay, de Chichimilá. La intriga se descubrió 
cuando Ay fue encontrado con una carta que hablaba sobre 
la sublevación de los mayas, motivo por el que fue fusilado. 
Antes de que otra cosa sucediera, el 30 de julio de 1847 
Cecilio Chi atacó Tepich, con ello inició la guerra de castas. 
Una vez desatado el conflicto, los mayas tomaron Chichimilá, 
Tihosuco, Dzinup y Tixcacalcupul; luego tocó su turno a 
Ichmul, Valladolid, Chancenote, hasta apoderarse de Peto, 
Yaxcabá y Sotuta.
El gobierno y la Iglesia se esforzaron por restablecer la 
paz. El cura Canuto Vela envió una carta a Jacinto Pat y a 
Cecilio Chi, en la que les pedía que cesaran las matanzas. 
En 1851 y 1853 un grupo 
de mayas rebeldes firmó 
la paz con el gobierno de 
Yucatán, por este acto 
quedaron separados de los 
de Chan Santa Cruz. De ahí 
en adelante se les conoció 
como los mayas pacíficos del 
sur y sus fuerzas quedaron 
concentradas en Chichanha 
e Icaiché.
¿Sabías que.
..?
Iglesia en Tihosuco.