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Libro para el maestro
BIBLIOGRAFÍA
de cada bloque y pida que diferencien la duración de 
cada periodo abordado. 
Multicausalidad.
Es una de las nociones que más 
dificultades presenta en la explicación histórica. Por lo 
general, los estudiantes creen que los fenómenos socia-
les e históricos son estáticos y se les dificulta establecer 
relaciones entre los distintos aspectos de la realidad 
presente o pasada. También consideran que existe una 
causa para cada consecuencia y tienden a elaborar ex-
plicaciones monocausales y a ignorar la diversidad de 
factores que intervienen en un hecho o proceso. “Si 
bien el alumnado aprende con relativa facilidad el he-
cho de que las causas siempre preceden a los efectos, 
no le resulta tan fácil atribuir los hechos a más de una 
causa y que a partir de ellos pueda haber más de una 
consecuencia” (Hernández Cardona: 2005, p. 41)
Entre los pasos que se deben dar para llegar a una ex-
plicación de los hechos y procesos históricos está, en 
primer lugar, realizar un análisis de los ámbitos de la 
vida social (político, económico, social y cultural) a fin 
de llegar a la identificación, análisis, comprensión y ex-
plicación de los múltiples elementos que intervienen en 
ellos (causas) y de las diversas consecuencias que traen 
consigo. Procure hacer uso de esquemas y mapas con-
ceptuales que representen gráficamente la multicausa-
lidad de los hechos y procesos históricos abordados a lo 
largo del curso, a fin de que facilite la comprensión de 
esta noción por parte de los alumnos. 
Además, se sugiere trabajar con las líneas del tiempo 
conformadas por diversos ámbitos con el fin de evitar 
las explicaciones monocausales. Haga hincapié en que 
un hecho o proceso histórico puede tener consecuen-
cias a corto, mediano y largo plazo y explique cons-
tantemente que las relaciones entre causas y conse-
cuencias no son lineales sino que conforman una red 
compleja y dinámica de hechos y procesos. (Prats: 
2001, p. 31)
Espacio histórico. 
Tradicionalmente, en el estudio 
de la Historia, se procuraba la ubicación geográfica de 
hechos y procesos con la incorporación de mapas du-
rante la clase o con los incluidos en los libros de His-
toria. Sin embargo, se ha demostrado que esto no 
siempre permite que la ubicación espacial se lleve a 
cabo, pues existen problemas “… en la mera localiza-
ción de unidades territoriales o puntos que aparecen 
en el relato histórico; se hace de manera incorrecta, 
especialmente cuando se trata de países o ciudades no 
demasiado próximas… en la confusión entre unidades 
territoriales actuales y pasadas…” (Prats: 2001. p. 49). 
Por otro lado, se considera que esta estrategia didácti-
ca tampoco garantiza que los alumnos establezcan 
una relación entre el lugar donde suceden los hechos 
y procesos y el desarrollo de los mismos.
Los estudios han demostrado que alumnos de secunda-
ria no pueden ubicar de manera correcta los lugares 
donde sucedieron los procesos que han estudiado y co-
meten errores que no hacen más que evidenciar que, 
para ellos, es indistinto el espacio donde sucedieron, 
pues tal como es presentado, se convierte en un dato 
más del pasado que les resulta inconexo y sin sentido.
Sin duda, es necesario rebasar la simple localización en 
mapas de hechos o procesos; no obstante, tampoco 
debe ser abandonada, sino enriquecida y contextuali-
zada, para que los alumnos comprendan que existe 
una relación entre el tiempo y el espacio. Se debe in-
corporar el espacio con sus múltiples elementos y rela-
ciones con los hechos y grupos sociales como parte del 
contenido que se estudie, con el propósito de que el 
espacio se vuelva un elemento explicativo y constitu-
tivo del pasado, que permita una mayor comprensión 
de los procesos y desarrolle las habilidades propuestas 
para lograr los aprendizajes esperados. 
Recupere el trabajo realizado en la asignatura de Geo-
grafía de México y del Mundo sobre los diversos compo-
nentes del espacio para que los alumnos comprendan la 
interrelación de factores en la conformación del espacio 
geográfico e histórico. Las situaciones de aprendizaje de 
la sección ¡Ubícate! de cada secuencia, así como el tra-
bajo con los diversos mapas del libro, le presentan una 
oportunidad para que los alumnos localicen y relacio-
nen las características de los espacios históricos con los 
temas que están aprendiendo.
Recuerde constantemente que estudiar el espacio im-
plica analizar la dinámica entre naturaleza, economía, 
sociedad y cultura a lo largo del tiempo. Es necesario 
hacer hincapié en cómo el ser humano ha organizado 
su territorio, cómo se ha adaptado y transformado la 
naturaleza y cuál ha sido su impacto en el ambiente.